¿Qué es la ACVC?

La Asociación Campesina del Valle del Río Cimitarra es una organización de carácter no nacional e integra los propósitos de la comunidad a través de las Juntas de Acción Comunal, cooperativas, comités pesqueros y otras agrupaciones de trabajadores del campo, en el marco de la defensa integral de los derechos humanos y la lucha por la tierra.

Somos una organización social no gubernamental campesina que desarrolla un trabajo organizativo, político y social con el sector rural de ocho municipios del Magdalena Medio colombiano. Está compuesta por 120 Juntas de Acción Comunal veredales de los municipios de Yondó, Cantagallo, San Pablo, Remedios y del corregimiento Ciénaga del Opón de Barrancabermeja en el Magdalena Medio colombiano.

El campesinado de la ACVC se ha organizado para resistir social, políticamente y desde la civilidad a los permanentes embates de los partidarios de un modelo de desarrollo autoritario y excluyente en la región. Este proyecto fascista ha asesinado, expropiado violentamente y desplazado a decenas de miles de campesinos y pobladores urbanos del Magdalena Medio. Esta organización en la actualidad desarrolla su labor en los siguientes campos: atención al desplazamiento interno campesino, defensa integral de los derechos humanos en la región, implementación de proyectos productivos de seguridad alimentaria, planificación del desarrollo local y regional, sustitución de cultivos de coca, capacitación y fomento a los procesos organizativos campesinos.

Como resultante de los masivos desplazamientos campesinos de 1998 a la ciudad de Barrancabermeja y después de una negociación, el Gobierno firmó unos acuerdos con el sector campesino del Magdalena Medio en los que se compromete a garantizar el derecho a la vida de los campesinos, a perseguir a los grupos paramilitares, a castigar a los militares y agentes del Estado culpables, por omisión o acción directa, de las graves violaciones de derechos humanos en la región. Además se comprometió a invertir los recursos necesarios para la implementación de un Plan de Desarrollo y de Protección Integral de los Derechos Humanos en el Magdalena Medio. Desafortunadamente estos acuerdos han tenido un incumplimiento sistemático e intencionado por parte del Gobierno. Después de los acuerdos de octubre de 1998 han sido asesinados más de cien líderes sociales de la región y se ha sometido al desplazamiento forzado a cerca de 20 mil personas.